Es importante tener una dieta adaptada a su problema de deglución, la cual debe estar seguida desde el servicio de nutrición, así como el de rehabilitación para así asegurar una deglución segura y eficaz.
Debemos de tener en cuenta el control de factores como el volumen o la viscosidad de los alimentos tanto de los sólidos como de los líquidos ingeridos. Éstos dos índices variarán en función del problema concreto de cada paciente, determinada por la valoración logopédica pertinente, por lo que no podemos hacer una recomendación general para todos, pero sí podemos ofrecer algunos consejos básicos desde el punto de vista logopédico como:
- Uso de cucharas pequeñas para así controlar mejor el volumen de alimento ingerido de una vez.
- No hacer comidas largas (máximo 30-45 minutos) ya que puede haber una fatiga muscular que pueda desencadenar en un atragantamiento. Es mejor hacer más comidas al día que sesiones de ingesta largas.
- Usar consistencias uniformes y homogéneas (la recomendada según valoración de la deglución), evitar el uso de dobles texturas en un mismo alimento como, por ejemplo, sopas, arroz con leche, bollería mojada en leche o café, etc.
- Hacer uso de espesantes a base de gomas si se estima oportuno para mejorar la consistencia de los alimentos. Esto siempre se hará bajo prescripción médica y según la valoración de deglución.
- Tener en cuenta las patologías de base como, por ejemplo, diabetes.
Debemos evitar a nivel general (cada caso particular debe ser valorado):
- Alimentos secos que se puedan dispersar por la boca y dificulte su formación de bolo por la lengua (p.e. pan tostado o frutos secos).
- Alimentos de consistencia pegajosa que puedan quedar pegados en el paladar y/o los dientes (p.e. caramelos).
- Alimentos fibrosos y/o con filamentos (p.e. piña, naranja, algunas verduras o carnes).
- Cuidado con alimentos jugosos y que segreguen mucho líquido al masticarlos (p.e. frutas: sandía, melón o naranja).
- Cuidado con alimentos que puedan contener espinas, pequeños huesos o frutas con semillas.
- No tomar gelatinas comerciales, hacer uso de aguas gelificadas que son más seguras ya que no pierden consistencia.
Encarna García Ortega, Lidia Gómez Cobos, Luisa Gómez Flores. Logopedia. Servicio de MFyR HCU Virgen de la Arrixaca.